Son los llamados Tan T´íen inferior (que en el caso de la mujer está localizado en el útero), Tan T´ien medio (en la zona del pecho, más concretamente, la glándula timo) y el Tan T´ien superior o Sen que es la conciencia.
Si la primera de estas fuentes de energía se halla colapsada, la energía no fluye por nuestro cuerpo como debiera.
El útero es parte del sistema reproductivo de la mujer. Durante la etapa fértil de tu vida, da paso cada mes a la menstruación, si el óvulo no ha sido fecundado. De lo contrario, será el hogar donde se irá gestando una nueva vida.
Generalmente, no nos damos cuenta de cómo nos afectan las emociones en el día a día, especialmente las negativas como la tristeza, miedo, rabia, decepción, dolor y frustración.
El cuerpo va absorbiendo todo esto y es así como los órganos internos se pueden ver afectados por nuestras emociones.
Según la medicina tradicional china, el útero, junto con los ovarios, es el centro clave para la generación de la energía sexual en la mujer.
Si la primera de estas fuentes de energía se halla colapsada, la energía no fluye por nuestro cuerpo como debiera.
El útero es parte del sistema reproductivo de la mujer. Durante la etapa fértil de tu vida, da paso cada mes a la menstruación, si el óvulo no ha sido fecundado. De lo contrario, será el hogar donde se irá gestando una nueva vida.
Generalmente, no nos damos cuenta de cómo nos afectan las emociones en el día a día, especialmente las negativas como la tristeza, miedo, rabia, decepción, dolor y frustración.
El cuerpo va absorbiendo todo esto y es así como los órganos internos se pueden ver afectados por nuestras emociones.
Según la medicina tradicional china, el útero, junto con los ovarios, es el centro clave para la generación de la energía sexual en la mujer.
La energía sexual luego se transforma en energía vital (chi), indispensable para la salud del organismo. Por ello, las prácticas para relajar y liberar el útero de energías y emociones negativas recargan y vitalizan todo el cuerpo, e inciden favorablemente en la sexualidad femenina.
De acuerdo a quienes practican las terapias holísticas, este tipo de ejercicios te puede ayudar a prevenir dolencias y enfermedades del útero, como los fibromas uterinos, la endometriosis, el cáncer de cuello uterino y el cáncer de útero, entre otras.
Para iniciar estas prácticas, necesitas primero establecer una conexión con tu útero. Por lo general, te acuerdas de él sólo cuando viene la menstruación, te duele y, por supuesto, cuando estás embarazada.
Sin embargo, por lo general las mujeres estamos desconectadas emocional y cognitivamente de nuestro útero.
A continuación, hallarás tres ejercicios para despejar tu útero de estas energías perjudiciales.
Para iniciar estas prácticas, necesitas primero establecer una conexión con tu útero. Por lo general, te acuerdas de él sólo cuando viene la menstruación, te duele y, por supuesto, cuando estás embarazada.
Sin embargo, por lo general las mujeres estamos desconectadas emocional y cognitivamente de nuestro útero.
A continuación, hallarás tres ejercicios para despejar tu útero de estas energías perjudiciales.
Si los realizas periódicamente notarás cambios positivos en tu estado emocional, en tus relaciones interpersonales y en tu sexualidad:
Más balance emocional y fuerza interior
Aumento en la energía y vitalidad física
Menstruaciones menos dolorosas o sin dolor alguno
Mayor creatividad
Mejor conocimiento de tus propias reacciones, necesidades y prioridades
Para comenzar tus ejercicios, lo primero que necesitas hacer es aprender a ubicar tu útero y a sentirlo en tu cuerpo, desde adentro.
Encuentra tu útero y llénalo de buenas energías
Coloca tus dedos pulgares sobre tu ombligo y luego une tus dedos índices cerca del pubis. El espacio que quede entre ambas manos corresponderá, más o menos, al útero. Visualízalo allí, siéntelo.
Más balance emocional y fuerza interior
Aumento en la energía y vitalidad física
Menstruaciones menos dolorosas o sin dolor alguno
Mayor creatividad
Mejor conocimiento de tus propias reacciones, necesidades y prioridades
Para comenzar tus ejercicios, lo primero que necesitas hacer es aprender a ubicar tu útero y a sentirlo en tu cuerpo, desde adentro.
Encuentra tu útero y llénalo de buenas energías
Coloca tus dedos pulgares sobre tu ombligo y luego une tus dedos índices cerca del pubis. El espacio que quede entre ambas manos corresponderá, más o menos, al útero. Visualízalo allí, siéntelo.
Respira suave y profundamente, mientras ves y sientes tu útero como si estuvieras dentro de él.
Frota tus manos entre sí hasta que se genere calor y vuelve a colócalas sobre tu vientre para enviar energía cálida a tu útero.
Siente cómo tu útero se llena de esta profunda e íntima calidez. Siente cómo tu útero responde a esta agradable caricia. Haz este ejercicio con amorosa intención.
Relaja por completo tu útero
Contrae los músculos de tu piso pélvico, como si estuvieras conteniendo la orina, partiendo desde tus genitales externos, hacia arriba, pasando por la vagina y finalmente llegando hasta tu útero.
Relaja por completo tu útero
Contrae los músculos de tu piso pélvico, como si estuvieras conteniendo la orina, partiendo desde tus genitales externos, hacia arriba, pasando por la vagina y finalmente llegando hasta tu útero.
El útero es un órgano muscular, y cuando lo contraes la parte inferior de tu vientre se mete hacia dentro. Después de unos segundos de contracción, espira con relajación y placer (Ahhhhh!) y suelta completamente los músculos del útero y toda la zona pélvica. Repite dos veces más.
Limpia tu útero de energías y emociones negativas
Imagina que inspiras luz blanca (o de tu color preferido) hacia dentro de tu cuerpo y que luego, al espirar, diriges esa luz hasta tu útero. Sonríe, mientras sientes cómo tu útero se va llenando de esa radiante y vibrante energía.
Limpia tu útero de energías y emociones negativas
Imagina que inspiras luz blanca (o de tu color preferido) hacia dentro de tu cuerpo y que luego, al espirar, diriges esa luz hasta tu útero. Sonríe, mientras sientes cómo tu útero se va llenando de esa radiante y vibrante energía.
Cuando sientas que tu útero se encuentra rebosante de luz, visualiza tus piernas como dos columnas de energía que te conectan por tus pies con el suelo, la Madre Tierra.
Descarga ahora, con cada espiración cualquier tensión, dolor, emoción negativa y energía densa que pudiera estar atrapada en tu útero. Siente cómo se liberan el dolor, la angustia, la rabia, la tristeza, el resentimiento y toda otra emoción y sentimiento negativos que hayas acumulado a lo largo de tu vida en este importante centro de tu feminidad.
Fuente: http://www.logicaecologica.es/2015/06/15/ejercicios-energeticos-para-sanar-el-utero/
Fuente: http://www.logicaecologica.es/2015/06/15/ejercicios-energeticos-para-sanar-el-utero/