sábado, 25 de julio de 2015

BREVE GUÍA PARA LA FUTURA MAMÁ


Todo el desarrollo que vive el embrión desde la fecundación del óvulo por el espermatozoide, hasta el momento en que se va a dar a luz, es denominado embarazo. 

Sabemos que durante este período, las mujeres sufren importantes cambios hormonales, lo que puede producir malestares físicos y psicológicos. 

El embarazo humano dura un total de 40 semanas, equivalente a 9 meses según el calendario, pudiendo adelantarse a la semana 38 o atrasarse a la 42 y aun así estaría dentro de lo normal.

Estos cambios hormonales se dan con más frecuencia durante el primer trimestre (meses del 1 al 3), aunque cabe destacar que algunas mujeres no sienten estos síntomas y siguen su vida normal sin enterarse que están embarazas hasta que la ropa ya no les queda. 

Incluso, algunas mujeres quedan embarazadas en su periodo menstrual y a éstas futuras madres les viene el cansancio físico en el segundo trimestre de embarazo (meses del 4 al 6).

El embarazo se divide en 3 etapas, a continuación se describirán en cuanto a los cambios emociones que pasan algunas mujeres durante el tiempo en gestación.


1 trimestre (0 a 15 semanas)

Los cambios físicos toman relevancia, y más en mujeres que se enfrentan por primera vez a un embarazo.
Probablemente al principio del embarazo hayan sentimientos contradictorios acerca de la maternidad, periodos de angustia y miedos al pensar en la posibilidad de perder el bebe.
Se siente un poco más irritable y su ánimo cambia frecuentemente; no hay que preocuparse porque es normal, de a poco comienza a vincularse con su bebe.

2 trimestre (16 a 30 semanas)

En esta etapa del embarazo la mujer concentra sus pensamientos hacia el feto en crecimiento, tiene pensamientos como: “Ojalá que esté completo mi bebe”, “Que nazca sano”, “Que no muera”, entre otros.

Los cambios emocionales que pasa la mujer en ese periodo no alteran la salud del niño, aunque a veces la mamá relaciona sus cambios emocionales con la percepción de que el bebe está inquieto o que se ha quedado tranquilo.

3 trimestre (30 a 38 o más semanas)

Ya se siente la cercanía al parto como un momento único y distinto para la mujer, pero todavía pueden existir temores por una situación futura desconocida.
Surge la necesidad de imaginar una gran variedad de situaciones respecto a las características de ese hijo ya formado. Esto puede hacer que aumente las ganas de conocer al bebe y a la vez temor de que suceda algo inesperado o no deseado.

El apoyo de los médicos y la pareja es fundamental para la mamá, para que sienta tranquilidad y así poder disfrutar el momento del parto como un acontecimiento lleno de plenitud y felicidad.

Breve guía para la futura mamá: Cambio hormonales durante el embarazo

El calcio es el nutriente principal que la mujer debe recibir durante este período, ya que le sirve tanto a ella como al bebé, debido a que el feto le absorbe el calcio y esto afecta a la mujer, haciendo que se sienta más débil, pudiendo provocar pérdida de cabello. Para esto el calcio también está presente en otros alimentos como en las semillas de sésamo y las verduras de hoja verde. Ver artículo: “7 Alimentos para mejorar la salud de tus huesos” en ésta misma página.

Náuseas:

Durante el embarazo las madres se colocan sensibles e intolerantes hacia algunos alimentos. A menudo aparecen náuseas que pueden darse en la mañana, durante el día y por la noche, para esto se recomienda:
Sustituir los lácteos de vaca por lácteos de cabra u oveja, estos provocan menos alergias.

Para las náuseas de la mañana es recomendable tener a mano galletas integrales y frutos secos y comerlos al levantarse.

La infusión de jengibre fresco es uno de los remedios más populares contra estas náuseas y los mareos en el auto. La infusión no debe ser muy cargada, ya que el jengibre es un condimento que puede ser irritante.

Indigestión y acidez:

El crecimiento del bebé comprime los órganos internos de la madre, incluido el estómago, lo cual puede provocar acidez y sensación de mala digestión, para esto sigue los siguientes consejos:

Comer en pequeñas dosis y unas 5 o 6 veces al día.

Evitar alimentos excitantes (café, té negro, chocolate) o procesados (embutidos, conservas, precocinados).

Las infusiones de manzanilla o poleo son un buen remedio.

No acostarse inmediatamente después de comer y dormir con la cabeza un poco levantada.

Estreñimiento:

Puede que ya exista este problema, pero en el embarazo se puede acentuar porque las hormonas ralentizan los movimientos de los intestinos.

Para esto es recomendable:
Beber mucha agua.

Aumentar el consumo de fruta, verduras, cereales integrales y vegetales verdes como espinaca, acelga y lechuga.

Hacer ejercicio a diario y aplicar este truco: dejar en remojo por la noche varias ciruelas y damascos (albaricoques) secos: beber por la mañana el líquido y comer la fruta mezclada con yogur.

Dolor de espalda:

Durante el embarazo se flexibilizan las articulaciones. Se debe mantener un ejercicio constante, ya que si no es así no se obtiene un buen tono muscular y agravan los problemas. Realizar ejercicios suaves, leves para mejorar la postura corporal. Practicar moderadamente ejercicios como yoga o Pilates. Recordemos que “Órgano que no se usa se atrofia”.

Estrés:

Como ya habíamos dicho anteriormente algunas mujeres en este período de gestación están más propensas a cambios emocionales, hay que prestar atención a estos cambios. Si el cuerpo lo pide debemos:
Descansar, recostarse, respirar profundamente y dormir todo lo que sea necesario.

Ideal acostarse temprano y hacer ejercicios de respiración por la mañana para nutrir el cuerpo con oxígeno.

Son recomendaciones fundamentales que normalmente el ritmo frenético de vida nos impide, pero que se debe priorizar por la influencia negativa demostrada del estrés sobre el feto.

Generalidades

Finalizando, destacaremos que hay que tomarle la debida importancia a cada uno de los 3 trimestres del embarazo, ya que en cada uno se vive algo distinto tanto física como psicológicamente.

Por otro lado no todas las mujeres pasan por estos síntomas del embarazo; cada embarazo es único con sus diversas características que cada mujer siente.

Podemos darnos cuenta de que sobrellevar un embarazo no es un simple proceso que le toca llevar a una mujer; no es menor gestar una vida dentro de su vientre durante 9 meses. Se deben tomar precauciones para que así ella y el bebé se encuentren en perfectas condiciones, asistir a las citas con el ginecólogo o matrona, realizar las ecografías en el tiempo correspondiente, ya que es en un tiempo determinado el cual se tiene que realizar para descartar anomalías o algún síndrome.

No fumar, porque el humo traspasa la placenta afectando su desarrollo y crecimiento, y también al momento de nacer, el bebé puede sufrir infecciones respiratorias. Tampoco beber bebidas alcohólicas, ya que puede haber aborto instantáneo en los primeros meses, que nazca con bajo peso o que más adelante sufra problemas diversos de aprendizaje.

Para evitar todas estas complicaciones se requiere llevar una vida saludable; para el bien estar de la madre, del feto y familiares. Realizar ejercicios suaves y caminar mucho en el último trimestre para así lograr tener un mejor parto y que todo salga bien.

Fuente: http://senderosaludable.net/breve-guia-para-la-futura-mama/