Hoy en día es ampliamente aceptado que las actividades humanas están contribuyendo al calentamiento global y al consiguiente cambio climático.
Esto se debe, principalmente, al incremento de nuestras emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en la atmósfera. Estos gases actúan reteniendo el calor recibido por el sol y acumulándolo, lo cual altera la dinámica climática de nuestro Planeta y, en definitiva, el entorno que habitamos y del que dependemos.
Las evidencias científicas que relacionan el crecimiento económico y demográfico desde el inicio de la Revolución Industrial con el calentamiento global son numerosas. Las temperaturas registradas hasta 2016 han sido 1,2º C más altas con respecto a los niveles preindustriales, y si no ponemos remedio, podrían aumentar más de 4 º C en menos de 100 años.
El calentamiento global supone cambios en los patrones climáticos planetarios, lo cual puede generar consecuencias sin precedentes a distintos niveles.
Estamos ante uno de los principales retos a los que se enfrenta nuestra sociedad, cuyos efectos pondrán a prueba la salud de las personas y del Planeta
Los efectos del cambio climático sobre la Tierra, en una escala global, son cada vez más notables y evidentes
El incremento de la temperatura media del Planeta, la reducción de precipitaciones y el aumento de la frecuencia y la intensidad de episodios meteorológicos extremos (olas de frio / calor, ciclones …) traerán consecuencias como la subida del nivel de mar, las sequías, las inundaciones, los incendios forestales, las alteraciones en los sistemas hidrológicos, la extinción de especies, la propagación de especies invasoras o la disminución de la productividad de los cultivos, entre otros.
Existe un amplio consenso en la comunidad científica sobre los efectos negativos del cambio climático sobre la salud humana.
Los grupos de población más vulnerables a nivel epidemiológico son los niños, los mayores de 65 años y los enfermos crónicos.
El cambio climático será responsable directo de unos 60.000 fallecimientos en 2030 y de unos 260.000 en el año 2100, sin contar las numerosas hospitalizaciones debido a las cada vez más frecuentes olas de frio y de calor y a los fenómenos climatológicos extremos.
Además, afectará de manera indirecta por medio de la proliferación de enfermedades típicas de otras latitudes transmitidas por especies vectores o incluso por el agua.
Y no nos podemos olvidar de cómo va a afectar todo esto en la actual economía. Los sectores más afectados por el cambio climático serán aquellos que dependan de forma más directa de las condiciones climáticas.
Especialmente grave serán afectados los ecosistemas naturales, los recursos hídricos, la producción agrícola y la fauna animal.
Sin duda, el sector primario (agricultura, ganadería, pesca y silvicultura) será el más afectado, ya que las alteraciones en el régimen pluvial y la desertificación repercutirán en una disminución de la producción.
En el caso del sector forestal, será especialmente vulnerable por el incremento del riesgo de incendios.
El sector sanitario verá aumentar la demanda de servicios debido a los tratamientos relacionados con las enfermedades contagiosas, la prevención y los episodios climatológicos extremos.
Otro de los sectores afectados será el turismo. Los destinos turísticos relacionados con la nieve, la playa y la naturaleza deberán adaptar sus actividades o bien desplazarse hacia otras ubicaciones para conseguir las condiciones climáticas idóneas para su actividad.
Como consecuencia de la vulnerabilidad de los anteriores sectores, el financiero y el de los seguros se verán también notablemente afectados en sus negocios, lo cual se traducirá en un aumento de las primas y en una reducción de las coberturas para afrontar los mayores riesgos futuros.
Un panorama ciertamente preocupante sobre el que está en nuestra mano actuar para cambiar la tendencia y minimizar las consecuencias de este cambio trascendental en el que ya estamos inmersos.
La humanidad ya afronta graves consecuencias del cambio climático, en Planeta en Peligro: “Está en peligro la vida que sostiene a la humanidad”, esa es la alerta del Fondo Mundial para la Naturaleza. Más de la mitad de variedades de animales vertebrados se ha perdido en los últimos años y la explotación salvaje de los recursos naturales más los efectos de la contaminación, son algunas de las causas. Ver Vídeo: