martes, 19 de abril de 2016

Cómo reducir la tos con flema


Aunque nos cueste o no estemos acostumbrados, es muy importante que bebamos, al menos, dos litros de agua diarios para ayudar a fluidificar las flemas y favorecer su expulsión

Gracias a la tos el organismo expulsa los agentes extraños que están obstaculizando las vías respiratorias.

Puede aparecer cuando estamos resfriados, si tenemos asma o alguna infección pulmonar o incluso por alergias y respirar sustancias nocivas.

En este artículo te contamos cómo reducir la tos con flema, otro de los mecanismos que tiene el cuerpo para eliminar lo que estorba en los pulmones.


Qué saber sobre la tos con flema

Este tipo de reacción natural del organismo permite mover y expulsar las cantidades excesivas de flema o moco que aparecen a causa de una infección.

Esta sustancia se produce y acumula en los pulmones y, si bien tiene como objetivo luchar contra los procesos inflamatorios, cuando la cantidad es mayor a la normal molesta y causa congestión de pecho.

La única forma para eliminar la flema es a través de la tos y la expectoración. 

De esta manera todo el sistema respiratorio se libera de aquello que le molesta.

Sin embargo, muchas veces sucede que aunque tosamos no podemos expulsar la mucosidad que se almacena en los pulmones. Por ello debemos recurrir a ciertos remedios caseros que la reduzcan en cantidad y, al mismo tiempo, la despeguen de las paredes pulmonares para excretarlas sin problema.


Recetas naturales para la tos con flemas

Si estás padeciendo ese tipo de tos, que incluye moco y que te hace sentir mal y sin fuerzas para hacer tus actividades cotidianas, te recomendamos que emplees alguno de los siguientes remedios caseros:

Agua

Es muy importante que te mantengas bien hidratado y bebas a diario, al menos, 2 litros de agua (en verano y cuando estás enfermo se aconsejan 3 litros).

Cuanto más líquido consumas, más podrán diluirse las flemas. Podrás expulsarlas sin problemas al toser. También puedes beber zumos de fruta naturales o infusiones de hierbas.
Vapores

Cuando tenemos tos una de las mejores maneras de ayudarnos a desprender la mucosidad es haciendo inhalaciones de vapor.

Pon en un cazo una buena cantidad de agua y calienta.

Cuando rompa el hervor acerca la cara y tapa la cabeza con una toalla para que el vapor no se “escape”. Ten cuidado de no quemarte.


Algunas personas le agregan un puñado de sal gruesa o unas hojas de hierbas medicinales tales como el eucalipto, la menta o el romero. Otras opciones recomendadas son la salvia y el saúco.

Incluso tienes la posibilidad de echar unas gotas de los aceites esenciales de estas plantas.

Ajo

Es uno de los mayores antibacterianos y antiinfecciosos que existen. Se considera el mejor antibiótico natural y, por ende, es perfecto para la tos con flema.

Puedes consumirlo directamente crudo (1 o 2 dientes en ayunas) o añadirlo a tus comidas siempre que no se cocine.

Algunos incluso preparan una infusión con 1 taza de agua y 2 dientes de ajo. Cuelan el líquido y lo beben con una cucharada de miel (otro potente remedio casero en estas ocasiones).

Pimienta y miel

Es un remedio casero eficaz porque combina dos ingredientes con grandes poderes medicinales.

Simplemente tienes que preparar un té como de costumbre (en hebras o en bolsita) y añadirle una cucharada de miel junto a una pizca de pimienta blanca molida. Bebe tres tazas al día hasta que hayas expulsado todas las flemas.


Cebolla

El tercero de los maravillosos remedios caseros para este tipo de problemas.

Entre los beneficios de la cebolla, destacan sus propiedades:

  • Sedantes
  • Antibióticas
  • Expectorantes
  • Antiespasmódicas
  • Mucolíticas
  • Broncodilatadoras

Sirve para combatir las infecciones y desinflamar los pulmones. No dudes en añadir cebolla cruda en todas tus ensaladas o preparaciones.

También puedes aprovechar sus beneficios haciendo unas inhalaciones de vapor con un cazo que contenga una cebolla partida al medio (hervida algunos minutos).

Otro de los remedios caseros “de la abuela” consta en cortar una cebolla por la mitad y colocarla en una bandeja en la mesilla de noche o debajo de la cama. De esta forma se aspiran sus aromas y se descongestiona más rápido la nariz o los pulmones, ayudando a expulsar la flema con mayor facilidad.

Infusión descongestiva

¿Qué te parecería combinar varios de los alimentos con poderes expectorantes en un mismo remedio casero? ¡No puede ser una mejor idea!

El limón es expectorante y el jengibre favorece la desaparición de la flema. En conjunto, este remedio es antiséptico, bactericida y calmante.

Ingredientes

½ cebolla
1 cucharada de miel (25 g)
El jugo de ½ limón
1 litro de agua
1 pizca de jengibre molido


Preparación

Para prepararlo debes poner en un cazo el agua y la cebolla picada.

Calienta hasta que rompa el hervor y deja que se reduzca el líquido a la mitad.

Cuela y agrega el zumo, la miel y el jengibre.

Bebe lo más caliente posible.

Leche y jengibre

Otra combinación fantástica para poder eliminar la mucosidad adherida a las paredes de los pulmones. Si bien la leche para algunas personas es un alimento prohibido porque le cae mal, este remedio puede ser la solución a la tos con flema.

Incluso se puede elegir una leche vegetal como de almendras o de arroz para evitar los efectos secundarios indeseados.


Antes de ir a la cama calienta un taza de leche y agrega una pizca de jengibre molido. Puedes endulzar como más te gusta (te aconsejamos con miel). Bebe y acuéstate a dormir.

Podrás conciliar el sueño más rápido y a la vez reducir la mucosidad.

Fuente: http://mejorconsalud.com/como-reducir-la-tos-con-flema/