domingo, 18 de octubre de 2015

Se puede dejar de ser una persona empática, y sufrir menos por los demás?


Las personas empáticas suelen sufrir más con las relaciones de pareja que “una persona normal”. Ser empático debería de ser algo positivo, un “bien”, por no decir hoy en día casi un “dón”. 

Pero la verdad es que a las personas empáticas les suele traer muchos problemas ser así. ¿Qué es una persona empática? Suelen ser personas que desafortunadamente también sufren una depresión o la han sufrido. 

En ocasiones proviene de su relación de pareja, que como hemos dicho es complicada precisamente por la hiper sensibilidad de la persona empática hacia los demás. 

Son capaces de internalizar los sentimientos de las otras personas como si fuesen los suyos propios. Una auténtica bomba de relojería anímica.

Una mujer empática -por ejemplo- siente muchísimo cuando su pareja es feliz, pero si esta está triste, es tal su conexión con ella, que sentirá su misma tristeza, su enfado o su ira. Y esto, traducido en un ambiente de convivencia, suele acabar en más posibilidades de pelea o discusión, y eso poco a poco llevar hasta una ruptura.

Lo malo de una persona empática es que, en ocasiones “se preocupa tanto” por su otro ser querido, que olvida la importancia de sus propios sentimientos y su propio “él” o su propio “ella”, transformándose sin darse cuenta en el saco de golpeo de boxeo de la relación. Alguien que en la pareja no se da valor, porque se olvida a si misma como persona, logrando poco a poco aflorecer una gran depresión. Sintiéndose cada vez menos persona, menos importante, más insignificante. Primero en la relación, y después en todo lo demás.

Y muchos diréis: Pero qué tipo de persona es capaz de hacer sentir así a la otra? (Hablando del “otro chico” o “chica” no-empática de la relación) Pues bien, en muchas ocasiones no es “la otra persona” la que pretende que su pareja empática se deprima o se sienta mal, son cosas que simplemente ocurren. 

Puede todo empezar por una simple discusión, o por <la persona empática> siempre dejar que sea su pareja quien decida qué cocinar, qué comer a qué restaurante ir, qué película ver o qué rompa comprarse. La persona empática, al pensar tanto en los demás, va poco a poco no solo perdiendo su posición en la relación, sino también su personalidad entera.

¿Cómo dejar de ser una persona empática?

Es imposible. No se puede. Uno nace así. Solo hay 3 consejos que dar cuando notes que estás dando toda tu energía a otra persona, y que te sientes mal, muy mal.

Recuerda que mereces ser feliz; toma tiempo para ti misma/o

Ten siempre presente que tus importantes no son menos importantes que los de los demás.

Todos estamos conectados. Si te haces daño a ti misma/o, se lo haces a los demás también.

Fuente: http://ecoremedios.com/se-puede-dejar-de-ser-una-persona-empatica-y-sufrir-menos-por-los-demas/